Un día hermoso, y yo acá encerrada. 

Necesito que mamá y papá me demuestren afecto sin que yo les recuerde que deben hacerlo. Estoy algo grande, y traigo complicaciones pero merezco un poquito de su cariño. 

Que lindo día, que bien me siento hoy.

Mañana va a ser un gran día te lo digo yo.

Valen más los hechos que las palabras.

  Para ser exacta nadie me hizo sentir algo así nunca, como ahora lo haces tú. Eres perfecto frente a todos mis sentidos, y aunque podemos tener fallas, seguimos juntos adelante, porque nos amamos y sabemos que de eso el tiempo y la experiencia se encargan. 
  Prometimos ser únicamente del otro, como el otro es de uno mismo, y eso para mi no es una promesa cualquiera. No fue en un momento cualquiera, y aunque los únicos testigos de ello, somos sólo nosotros, yo nunca olvidaré este como los demás momentos juntos. 

  TE AMO, y todavía no encuentro una palabra más abarcadora que me permita describir el amor que siento hoy por vos, mientras tanto no me cansaré de decirte que te amo, porque más que nunca lo siento desde lo más profundo de mi corazón.
  Que digan lo que quieran, estoy ciega, sorda y muda de amor por vos, pero... ¿que saben ellos de lo bien que me la paso a tu lado?

Me la paso tan bien aveces, que quisiera poder revivir todo el tiempo esos momentos y sentirme igual de bien como en la primera vez.

Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. Esta vez no me falles. 

  Llevo esperando demasiado tiempo para que las cosas mejoren, esta vez no me falles, por favor.

Diría que te quiero, pero ya lo sabes. Demasiado para ser sincera.

  Todos tenemos más para dar, sin embargo muchas veces nos quedamos con ello, por egoísmo, o por ver que no saben valorar minimamente el esfuerzo que uno hace. 

  Por eso aveces el mundo se me viene abajo, porque me doy cuenta de que nadie valora nada, e incluso paso a no saber valorar lo que los demás tienen para mi, y justo ahí en ese instante me siento una basura, trato de remediarlo, pero pasa lo siguiente: el otro tampoco sabe valorar mi esfuerzo.

Historias pasadas que no hay que olvidar.

NOCHE ALLÁ VOOOOOOOY!!!!!!!!!

Primavera, fiesta, música, previa, boliches, amigos, diversión. 

Y yo? yo te quiero a vos, sólo tengo ánimos para estar con vos, nada es mejor, te necesito cada vez más.

¿Que hacer y que no? Esa es la cuestión.

Hoy comprobé por completo que amo el VERDE, la naturaleza, respirar aire puro.

 

 Nuevos aires. Nuevos ambientes, nuevas personas. Nuevos compromisos, nuevos motivos para no caer. Nuevas aventuras, enemigos, sonrisas, lágrimas. 

  Nuevos capítulos se abren, y siguen construyendo el gran manual de la vida.

Admiro la forma en que afronto los problemas este último tiempo. No me reconozco.

Tengo un corazón pequeño, pero sentimientos enormes, todos y cada uno de ellos sólo para ti. Tómalo o déjalo nada de andar con vueltas. Estoy agotada como para andar con rodeos y hacerme cargo de un corazón destrozado.

Hoy fui feliz, 3 horas.

No pude, te tenía ahí, ni a centímetros, estabas pegado a mi. Sentía tu respiración, y hasta podía oír tus palpitaciones. No sabes de que se trata, pero te lo imaginas. No es la primera vez que lo hago. No pude, no me salían las palabras, me sentí una tonta, y termine llorando una vez más entre tus brazos. No quiero arruinarlo más, ni hacerte el culpable de mis peores pesadillas. Me duele el dolor que siento, dolor que ya no puedo ocultar.

No quisiera perder las esperanzas justo ahora. Pero se me hace que vuelve a suceder lo mismo una vez más.

Últimamente no me siento para nada inspirada. Me paso horas acostada, desganada, sin ánimos para nada, sólo pienso, llevo horas haciéndolo, y eso no esta muy bien. Me come la cabeza.

¿Que si te vas me quedo sola? ¿y como se supone que estoy ahora?

  Aunque me caiga a pedazos, y no me queden ganas de seguir. Volveré a levantarme. Tengo que seguir, las pocas personas que me quieren no merecen lo que hago, no tienen porque soportarme en este estado.

  Fingiré que todo esta perfecto mientras me duele, haré el bien en cuanto y en tanto este a mi alcance, y aunque me tire el alma y sienta que se me rompe en mil partes, lucharé para seguir, todavía no termina el juego, y no puedo abandonarme por cosas como estas. 

  Las cosas vienen saliendo demasiado mal, y mi mente me juega muy en contra, mis nervios aumentan, y mis dolores de cabeza también lo hacen. No quiero volverme completamente loca y que me traten como tal. Tiene que haber una persona en este maldito mundo que entienda lo que me pase, y no me ignore como lo hacen todos, ¿donde te escondes infeliz?

Un error, otro error, no aprendí la lección. Por volar te perdí, nos perdimos los dos.

Ahora si. Lo acepto, me siento enferma. He creado mi propia enfermedad, la peor de todas, la que reúne los peores síntomas. La enfermedad incurable de quererte tanto, y la que no me deja saber que es lo que debo hacer contigo ni conmigo misma.

No se por cuanto tiempo más soportaré esto.

Estoy a tiempo mi dicen. Pero que saben ellos lo que yo siento, si ni yo misma puede explicar como me siento exactamente en estos momentos. Es algo de no poder más y no saber que carajo hacer con la vida.

  Se aman, pero quien es capaz de afirmar que será todo como ellos dicen. 

  Mi mayor miedo es perderlo, que me deje parada sola en la vida. Me tranquiliza saber que hoy lo tengo, pero ¿por cuanto más estaremos juntos? ¿que pasará luego? Un par de lagrimas que terminan en cascada recorren mi rostro, haciéndose presentes cuando me cuestiono todo esto, y a decir verdad, se me hace difícil no pensarlo por como vienen las cosas. 

  Si tan sólo la realidad fuera en pequeñas proporciones como yo quiero, demostraría al menos un poco de alegría a la vida, pero eso, si eso, esta muy lejos de la mía por el momento.

  Recibo más de lo que merezco y aún así no me siento bien. Creo que es porque quiero ser mejor persona también, quiero hacer buenos actos y que tan solo una persona se acuerde de mi cuando ya no este en este mundo. Quiero hacer de mis palabras actos concretos y evitar cometer los mismos errores una y otra vez, como si nunca hubiera aprendido la lección. 

  Quiero vivir y respirar libertad, sin que personas con malas intenciones se interpongan en mi camino, y estoy dispuesta a intentarlo y no bajar los brazos hasta no ver que tan solo en una mínima porción cumplí con mi prometido. ¿Que tal si tu también lo intentas?

Las palabras sobran cuando dos personas que se aman se juran amor eterno.

  Me desperté. Imagine todos los momentos que pasaría en el día de hoy. Mamá debía despertarme. El cronograma de actividades planeadas así lo indicaba. Quizás se le había olvidado entre tantas obligaciones. Un escalofríos comenzó a recorrer mi cuerpo. Lo inimaginable me invadía, no quería ni pensarlo. No cabían dudas de que sólo se le había pasado de largo, e iríamos más tarde por lo que nos correspondía. Pasaban los minutos y mamá no aparecía, solo escuchaba pasos alterados detrás de cada puerta. Era algo normal. Después de todo en esta casa es algo común, además de las voces que se elevan hasta convertirse en gritos, las discusiones tontas, un par de peleas como en toda familia y demás. Sin embargo había algo que me tenía preocupada, y esquivaba pensarlo. Quería sacarlo de mis pensamientos, porque suponía que las cosas mejorarían y que un milagro obraría para ayudarlo y ayudarnos. 

  Entre el silencio que invadía mi habitación, y los ruidos particulares de la naturaleza y algunos movimientos de objetos, pude oír una conversación entra mamá y mi abuela. Esperábamos gente. Así que me dije a mi misma que hablaban de ellos. Seguía negandole a mi mente lo que no quería que pase y me venia atormentando desde ya hace una semana. 

  Ya con la mente tranquila me dispuse a dormir unos segundos más. Vengo muy cansada y como no venían a buscarme para hacer lo que debía, decidí aprovechar de ese tiempo. No alcance a echarme de nuevo, que aparece mamá por la puerta, dejando entrar en el acto una pequeña iluminación. Se me acerco, y yo no dejaba de pensar en lo que no lograba irse de mi cabeza, eso que no quería pensar, pero se me hacia imposible porque me mantuvo preocupada este ultimo tiempo. No venia a buscarme para hacer lo que teníamos planeado, se me acercó, tomó mi rostro y me dio la noticia que no quería recibir.

  Me eche a llorar, le dije "todos se mueren" llena de rabia. Le toco a él, una persona joven, llena de vida, que deja a toda una familia destrozada, a un par de niños sin padre y que no llegó a saborear como se debe esto que se llama vida.

  Estoy helada, muerta de miedo, todavía no caigo. Se que a todos nos llega la hora de partir, pero no me parece justo que le haya tocado a el. 

  Es sábado, es temprano, y se repite la historia. Ahora estas ahí con la abuela cuidándonos a todos desde el cielo. No vamos a olvidarte, y te recordaremos siempre como una persona alegre, que quería divertir a los demás. Te voy a echar de menos. Dejas un gran vacío pero siempre estarás en nuestros corazones.